lunes, 22 de septiembre de 2014

5 SEÑALES DE QUE NO ESTÁS ENTREVISTANDO BIEN A LOS CANDIDATOS

Con sus respectivas proporciones, la entrevista laboral también es una cita de negocios. ¿Qué pasa durante esa reunión que algunos aspirantes ya no continúan el proceso de contratación?


De acuerdo con el artículo 5 claves de un currículo ganador, uno de cada cuatro reclutadores recibe en promedio cincuenta postulaciones por vacante. De ellas, elimina el 90 % en la primera ronda, basándose primordialmente en el CV de las personas.
Pasado ese filtro, inician las entrevistas. Más allá de lo evidente, que la empresa evaluará a los aspirantes para saber qué tan aptos son para ingresar a su plantilla, los candidatos también estarán valorando si es o no atractivo laborar en la compañía, si la filosofía del lugar compagina con la suya y si el personal con quien dialoga le transmite confianza.
Sin embargo, hay acciones –algunas que parecen imperceptibles– que no lo muestran así. Es un buen momento, como reclutador, para reparar esos traspiés.

Realizas las mismas preguntas de siempre

¿En dónde vives? ¿Cuáles fueron tus empleos anteriores? Este tipo de cuestiones le informan al candidato que su currículo no fue leído cuidadosamente por quien lo citó. Hay más: las personas que han acudido a varias entrevistas se topan con los mismos interrogatorios y entonces contestan con las mismas respuestas, dejando pasar ambos información relevante para el puesto.

Te centras en el pasado y no en el futuro del candidato

Por supuesto que la experiencia previa de un aspirante es fundamental para ser contratado. No obstante, hoy en día los futuros empleados necesitan saber qué planes de carrera hay para ellos en las organizaciones. ¿Tendrán desarrollo en su puesto? ¿Podrán aspirar a otros cargos? Si no se comunica y explica esto en la entrevista, simplemente pareciera que no lo hay.

Te expresas negativamente de los empleados anteriores

La imagen que refleja un candidato al hablar mal de su empresa o trabajo anterior es la misma que revela una compañía al expresarse mal del colaborador que dejó o dejará el puesto vacante.

Sólo te fijas en personas que ya trabajaron en el puesto que deseas cubrir

Es una práctica habitual: si se necesita un diseñador, centras tu atención en quienes ya trabajaron como diseñadores; si se necesita un contador, evalúas a quienes ya se desempeñaron como tales. Y no está mal, siempre será válido y lógico.
Pero, ¿qué tal si de vez en cuando le brindas la oportunidad a otros interesados al puesto, esas personas que buscan darle un giro a su vida profesional y tienen otros conocimientos afines a la vacante que pueden ofrecer? Sería posible encontrar a un gran talento en las entrevistas.

No llevas un formato con la descripción del puesto y las habilidades que debe tener el aspirante

Las anotaciones que se hacen en el currículo del candidato al entrevistarlo son de gran valor. Sin embargo pueden complementarse con un esquema básico de las competencias laborales y conductuales que debe cubrir el solicitante para quedarse con el puesto.
De lo contrario se siguen evaluando los mismos aspectos de siempre, con los métodos de siempre, pudiendo reducir el tiempo del proceso de la contratación.

Con pequeños cambios se puede obtener información de mayor calidad en las entrevistas de trabajo y los candidatos tener la seguridad de que su tiempo y esfuerzo por acudir a las citas está siendo valorando de forma profesional.




Fuente: Blog OCC


INFORMES:
Lic. Carolina Guerra Q.
Coordinación de Bolsa de Trabajo

01 (477) 1 52 90 00 Ext. 9034

No hay comentarios.:

Publicar un comentario