miércoles, 22 de julio de 2015

4 FORMAS DE ENFRENTAR EL RECHAZO DE BUSCAR EMPLEO

Buscar una oportunidad laboral exige fortaleza mental para enfrentar el rechazo, pero cuando éste ocurre, ¿cómo levantar el ánimo y continuar hasta conseguirla?

La búsqueda de trabajo nunca es sencilla y lidiar con los rechazos puede provocar el desánimo de muchos candidatos además de perder la confianza para encontrar el puesto laboral ideal y en la empresa correcta.
Entonces, ¿cuál es la mejor manera de lidiar con un rechazo en el proceso de búsqueda de empleo? Según la consultora en reclutamiento especializado, Hays, lo que realmente importa es reaccionar de una manera positiva y proactiva sin pensar demasiado en cada uno de los rechazos. Con ello consigues mayores oportunidades de encontrar el puesto de trabajo deseado en un futuro cercano.
En su experiencia, estas cuatro técnicas te permitirán enfrentarte correctamente a los rechazos en el entorno laboral:

1) No tomarlo de forma personal

Es importante tener en cuenta los factores que han conducido al rechazo. Tal vez, la persona y la posición que se estaba buscando simplemente no coincidían, o quizás el empleador sentía que faltaban una o dos de las habilidades clave, o experiencia. Esto significa que algunas actitudes o acciones podrían necesitar de alguna mejora y es bueno centrarse en estos cambios.
Por otro lado, si se está lidiando con un rechazo continuo en la búsqueda de puestos de trabajo, se aconseja consultarlo con un miembro de la familia o un amigo. Hablar con personas de confianza ayuda a ser perspicaz y honesto. Como dice el refrán: "El mejor amigo no es el que siempre está de acuerdo con nosotros".

2) La importancia de una respuesta moderada y positiva

Es útil tener en cuenta la diferencia entre la reacción y la respuesta a una situación. 'Reacción' es el término que se usa para describir una actitud irracional y precipitada al rechazo, mientras que 'respuesta' significa un enfoque más mesurado y positivo.
Cuando se reacciona frente al “no”, es fácil atribuir la culpa a los demás y no lleva a ninguna parte; de hecho daña la actitud para futuras ocasiones. Por ello, es mejor pensar en lo que ha sucedido y luego trabajar para mejorar las posibilidades en ocasiones posteriores. Esto también ayuda a mantener un enfoque positivo, especialmente si se trata de más de un descarte.
ADVERTENCIA: Nunca se tiene que responder al rechazo con anuncios negativos sobre ese potencial empleador en las redes sociales. Esto puede fácilmente volverse en tu contra en el futuro.

3) Buscar retroalimentación útil

Teniendo en cuenta la situación detrás de cualquier rechazo, ayuda mucho reconocer y avanzar más allá de las circunstancias que estaban fuera del control del candidato. Estas pueden incluir sincronización, presupuestos, nuevas circunstancias, necesidades cambiantes, y temas similares.
Mientras que por razones legales u otros puede ser rechazada la solicitud, vale la pena pedir retroalimentación para que se pueda reflexionar y luego mejorar las debilidades que ese empleador ha identificado.
Al ser notificado de que la solicitud para un puesto de trabajo no ha tenido éxito, se aconsejaponerse en contacto con el reclutador o el empleador. Con un email bien estructurado con algunas preguntas será muy probable que se obtenga una respuesta constructiva.
No obstante, es importante resistir a la tentación de saturar al reclutador o empleador con mensajes y además es bueno tratar de no llegar con una actitud de frustración.
Es un mundo pequeño y el candidato puede encontrarse con esa persona o compañía de nuevo, por lo tanto, se necesita construir el mayor número de relaciones profesionales fuertes como sea posible en ese momento.
Asegurarse de dar las gracias a la persona que proporciona la retroalimentación, indica que se tomarán sus comentarios en cuenta para ser considerado para las oportunidades relevantes en el futuro.

4) Re-enfocarse

Después de evaluar las razones del rechazo, es importante volver a centrar la energía en los próximos pasos de la búsqueda de empleo. Si no se mejora correctamente la actitud después del rechazo sólo se va obstaculizar las posibilidades de obtener el puesto perfecto. Si se pierde el objetivo final, solamente se perjudica a uno mismo.
También vale la pena buscar oportunidades de capacitación y de voluntariado, sobre todo para aquellas habilidades clave que se ha determinado en el auto-análisis que deben mejorarse. Ambas acciones ayudan a construir una autovaloración positiva de lo que uno es capaz de hacer.
Lo ideal radica en volver a la búsqueda de trabajo revitalizado y reorientado y luego tomar el tiempo para asegurarse de que se aplica para los puestos adecuados. Algunas personas volverán a tratar de aplicar a puestos  a los que son insuficientemente cualificados. Esta es una de las formas de atraer rápidamente mayor número de rechazos. 

ANTES DE BUSCAR TRABAJO, ¡CUIDA TU REPUTACIÓN ONLINE!


No menosprecies la influencia de las redes sociales, ya que los reclutadores recurrirán a éstas para conocer un poco más sobre ti. Cuida lo que publicas.
Internet es una poderosa herramienta para encontrar empleo, pero también puede ser el motivo por el que no te contratan. Los candidatos estamos subestimando la influencia de redes sociales y otros medios online en nuestro desarrollo profesional.
La Asociación Mexicana de Internet (AMIPCI) estima que en México somos más de 50 millones de internautas. 9 de cada 10 tenemos al menos un perfil en redes sociales. 
Tus redes sociales y otros perfiles online son más públicos de lo que piensas y es lógico que las empresas quieran saber más de ti de lo que dice tu CV. Hay que tomar en cuenta que:
a. Las empresas no contratan empleados, contratan personas. Por muy talentoso que seas para cualquier organización es importante saber cómo te comportarás en la oficina y si encajarás con su cultura.
b. Las redes sociales NO son privadas. Si hay algo que realmente quieras mantener privado en tu vida ¡no lo publiques en Internet!
c. Tus perfiles online pueden impulsar tu carrera y mostrar algo más de tu personalidad, intereses y conocimientos. Son una extraordinaria tarjeta de presentación si aprendes a utilizarlas.
Por lo tanto, antes de mandar tu currículum a ese trabajo que buscas, antes de hacer contacto en Twitter con un líder de tu industria o antes de postularte a una vacante en el portal de una empresa revisa si el contenido de tus perfiles online proyectan el mensaje adecuado.

¿Cómo lo hago?

1.- Búscate en Google

Abre tu buscador y pon tu nombre. Si es muy común usa comillas y palabras clave. Ejemplo: “francisco díaz” contador df.
¿Qué dice Google de ti? ¿Aparece tu cuenta de Facebook? ¿tu perfil en LinkedIn? ¿el blog que creaste hace 5 años? Ingresa a esos sitios y revisa qué contenido pueden ver otras personas que se interesen en ti.

2.- Elimina lo negativo

Hace 3 años te pareció divertido subir a YouTube un video de la última (y salvaje) fiesta de generación. En Facebook acostumbras compartir las bromas que les juegas a tus colegas del trabajo y burlarte de tu jefe. O tal vez los mensajes que envías en Twitter contienen lenguaje altisonante. Si un empleador encuentra dicho contenido puede llevarse una mala impresión, así que bórralo u ocúltalo.

3.- Revisa la seguridad de tus redes

Todas las plataformas en línea que requieren tus datos de contacto tienen un Aviso de Privacidad y/o uso de datos ¿las has leído? ¿tienes restricciones para el público que puede ver tus actualizaciones? Si no tienes idea de lo que hablo es momento de tomarte un tiempo para revisar los Ajustes de Cuenta en cada uno de tus perfiles.
En cada red es posible seleccionar quién puede acceder a nuestra información. En Facebook, por ejemplo, puedes seleccionar álbumes como Privados, evitar ser encontrado por tu nombre en búsquedas en Google y autorizar contenidos donde fuiste etiquetado antes de que se publiquen. Revisa cada opción y protege tu información.

4.- Publica más cosas positivas

Deja visible aquella información que te gustaría que una empresa sepa de ti, por ejemplo que participas como voluntario en una asociación de rescate animal o que lideras una liga deportiva en tu colonia.
No siempre puedes deshacerte de toda tu basura digital, sobre todo cuando los contenidos son publicados por alguien más, sin embargo sí puedes desplazarlos.

5.- Comparte más contenidos

Comparte artículos de interés, proyectos exitosos, presentaciones de la universidad, fotografías que te hagan lucir profesional, actualizaciones sobre cursos que hayas tomado o seminarios a los que hayas asistido.

6.- No te hagas invisible

Borrar tu huella en la red por completo tampoco es buena idea, si un reclutador te busca y no encuentra nada de ti pierdes la oportunidad de impresionarlo.
Esta semana tómate una pausa en tu rutina y haz el experimento ¡búscate en internet y cuéntanos cómo te ves en la red!
FUENTE: Alto Nivel